Terapia Bioxidativa (Ozonoterapia)

(1 ozono)La terapia bioxidativa, que utiliza el ozono médico o el peróxido de hidrógeno, ha generado algo de controversia porque la población en general y los miembros de la comunidad médica no acaban de entenderla completamente.

Algunos insisten en que no debería usarse debido al riesgo de oxidación. El ozono y el peróxido de hidrógeno liberan su átomo de oxígeno extra, y esto es lo que causa la oxidación.

La oxidación es lo que hace que los objetos metálicos se oxiden, lo que hace que una manzana recién cortada se oscurezca, y a lo que los científicos culpan del envejecimiento celular en el cuerpo humano. Es por eso que las personas toman antioxidantes: para aminorar el proceso químico de la oxidación.

Sin embargo, lo que la mayoría de personas no sabe es que cada célula humana está envuelta por una capa enzimática que la hace resistente a la oxidación. Por otro lado, las bacterias, los virus y los microorganismos causantes de enfermedades no poseen esta capa enzimática y por eso se oxidan al estar en contacto con el ozono o con el peróxido de hidrógeno.

Según el Dr. Frank Shallenberger, conocido en Estados Unidos por tratar a pacientes con SIDA siguiendo un protocolo holístico, tanto el ozono como el peróxido de hidrógeno actúan aumentando la eficiencia del sistema enzimático antioxidante, el cual busca en el cuerpo los radicales libres que hay en exceso. Así pues, esto también mejora la inmunidad celular.

Otra fuente de controversia procede de la preocupación sobre el uso interno del peróxido de hidrógeno porque es un componente químico altamente reactivo y con propiedades corrosivas. Aunque es cierto que a una concentración del 35%el peróxido de hidrógeno es un oxidante muy fuerte (y si nose diluye puede ser extremadamente peligroso o incluso mortal) también es verdad lo contrario, cuando se diluye de la forma anteriormente descrita para propósitos específicamente terapéuticos. El peróxido de hidrógeno de uso alimentario adecuadamente diluido no sólo es seguro para el consumo interno sino que también produce numerosos efectos curativo.







Qué son los antioxidantes? "Son elementos presentes tanto en la dieta como en el organismo capaces de disminuir el daño que algunos productos de oxidación (radicales libres) tienen en nuestro cuerpo. Así, cuantos más radicales libres se formen, más antioxidantes serán necesarios", aclara Bittor Rodríguez, profesor de Nutrición y Bromatología de la Universidad del País Vasco. Los radicales libres producen el deterioro de las células, pero el cuerpo produce unas sustancias llamadas enzimas que cumplen la función de antioxidantes. "El problema se presenta cuando hay un exceso de radicales libres, y los antioxidantes naturales no pueden contrarrestar su acción, lo que causa la muerte celular, el envejecimiento, y algunos tipos de cáncer", apunta Carmen de Vega, doctora en Ciencia y Tecnología de los Alimentos.

De hecho, tal y como recuerda Bittor Rodríguez, "una de las teorías sobre la vejez se basa en que nuestro organismo se deteriora con el tiempo porque pierde fuerza para hacer frente a la génesis de los radicales libres". Ese aumento de radicales libres puede deberse a varios motivos: consumo excesivo de tabaco y alcohol, alimentación grasa, sedentarismo, exceso de radiación solar, ejercicio muy intenso (deportistas profesionales) o una dieta poco equilibrada. Pero de la misma forma que aumentan los radicales según los hábitos de vida, también puede aumentar la presencia de antioxidantes en el organismo a través de una alimentación sana y equilibrada. Y ahí es donde juegan un papel fundamental los alimentos ricos en antioxidantes


Los antioxidantes se encuentran contenidos en ajo , arroz integral, café , coliflor , brócoli , jengibre , perejil , cebolla , cítricos , semolina, tomates , aceite de semilla de la vid , té , romero , entre otros muchas sustancias. También son parte importante constituyente de la leche materna.


¿Qué es la Ozonoterapia?

La historia de la ozonoterapia comienza en Alemania. El precursor del uso del ozono, fue Werner von Siemens, quien en 1857 construyó el primer tubo de inducción para la destrucción de microorganismos. En la segunda década del siglo XX, otro alemán, el químico Justus Baron von Liebig fue el primero en estudiar las aplicaciones del ozono para uso humano.

Luego, fueron los rusos quienes aceleraron las investigaciones de esta nueva medicina y transfirieron los conocimientos a los países aliados. Aunque también se expandió en el resto del mundo, sobre todo después de la II Guerra Mundial.

En España la ozonoterapia está basada en los efectos benéficos del gas en el organismo que son muy variados. El ozono actúa como antioxidante; inmunomodulador (estimula a los glóbulos blancos, lo que aumenta las defensas del organismo ante agresiones externas como las infecciones, y la detección de células mutágenas que pueden producir cáncer o enfermedades autoinmunes); además a nivel de los glóbulos rojos se incrementa la liberación de oxígeno generando un mayor transporte de oxígeno a las células, mejorando la función celular y la circulación en general; y también es un poderoso germicida: elimina hongos, bacterias y virus.

Este conjunto de beneficios hace que las aplicaciones terapéuticas también sean muchas y para distintas enfermedades. Desde carcinomas; esclerosis cerebral y parkinson; hasta cistitis, trastornos circulatorios, cirrosis hepáticas, hepatitis y enfermedades vesiculares. También se tratan enfermedades reumáticas en general, poliartrosis, hernias discales, artrosis, tromboflebitis y varices; gangrena y ulceras diabéticas; colitis ulcerosa, colon irritable, eczema anal, fisuras y fístulas anales, hemorroides e infecciones genitales.

El ozono también se utiliza para curar la piel. Y el abanico de patologías es muy amplio: cicatrices, heridas resistentes a la cicatrización, dermatológicas en general (abscesos, fístulas, forúnculos, acné, etc.), quemaduras, hongos en general, herpes simple y zoster.

La ozonoterapia se utiliza con mayor frecuencia en las situaciones en que la medicina alopática no encuentra los efectos deseados. En el caso de pacientes en situaciones crónicas o críticas que hacen peligrar su vida o algunos de los miembros, como gangrenas, úlceras o problemas de visión, en especial cataratas, así como también infecciones generalizadas y problemas circulatorios.

El ozono para uso medicinal es una mezcla de oxigeno-ozono, que se logra por el paso de oxigeno puro por una descarga eléctrica de alto voltaje y alta frecuencia. Esta reacción química, realizada por un equipo especial de electromedicina, produce un gas con distintas concentraciones de ozono, acorde a la patología y el tratamiento. El gas, al entrar en contacto con el organismo produce cambios químicos terapéuticos.

El oxígeno-ozono al entrar en la sangre reacciona con los ácidos grasos insaturados convirtiéndolos en ozónidos y luego en peróxidos. El hierro de la sangre actúa como catalítico. Esta reacción hace que la hemoglobina libere oxígeno adicional en el torrente sanguíneo, se puede comprobar por el leve aumento de la presión arterial y el descenso de la presión venosa. Por otro lado, el aumento de los peróxidos favorece la oxidación celular y fortalece el sistema inmunológico.

El ozono cura porque mejora el metabolismo en forma integral. Por un lado, la circulación sanguínea mejora en los tejidos afectados. Por otro, el transporte de oxigeno y, por lo tanto el suministro de energía a las áreas inflamadas, es mejorado. Y también el sistema inmunológico es influenciado o estimulado de forma positiva.

El ozono también tiene un efecto vacuna, por cuanto fragmentos de virus, parcialmente destruidos, pueden funcionar como estímulo en la producción de anticuerpos. Además, como el ozono induce a una mayor agresividad de los leucocitos, hace que los virus sean atacados más rápidamente y con mayor fuerza. También actúa como antitóxico, sin destruir los tejidos. Y por último, el ozono no puede ser inactivado por sistemas enzimáticos y por eso actúa sobre cualquier tipo de agresor.

La ozonoterapia no es una medicina alternativa, sino que es considerada una medicina natural. Sobre la base de todos los conocimientos que requiere la aplicación del gas, instrumenta los tratamientos con ozono independientemente de la utilización de fármacos específicos o de los posibles desatinos de ellos.

Desde este punto de vista, La ozonoterapia no tiene consecuencias colaterales con otros tratamientos. No compite, sino es aleatoria a cualquier otra aplicación médica.

Los tratamientos son rápidos, eficaces y económicos. Y consisten en un número de sesiones que varían en cantidad y duración, según la afección que se trata. Las aplicaciones no tienen efectos adversos.

La mezcla gaseosa de oxigeno-ozono se puede aplicar de múltiples maneras. En forma local mediante una campana de vidrio o una bolsa plástica acorde a las distintas partes del cuerpo (pierna, brazo, etc.).

Además se le inyecta por vía intraarterial, subcutánea, intramuscular, via rectal, intra articular entre otras.

Otro método para suministrarlo es a través de autohemotransfusion que consiste en la extracción de sangre a la cual se le agrega el oxigeno-ozono, se mezcla con la sangre y sin sacar la aguja, se la vuelve a inyectar en la corriente sanguínea.

La insuflación rectal se realiza aplicando directamente el gas por medio de una sonda fina, como si fuera un enema.

Otras aplicaciones se realizan a través de cremas. Estos productos al tomar contacto con el cuerpo, transmiten el ozono al organismo.

El ozono es un gas inestable que se descompone fácilmente a una velocidad que depende de la temperatura. Por eso, no deja residuos tóxicos ya que dentro del organismo se transforma en oxígeno.

Pero, a pesar de todas sus ventajas, la Ozonoterapia está contraindicada en casos de intoxicación alcohólica aguda, infarto cardiaco, alergias al ozono y embarazo. Estas contraindicaciones son debido al pequeño aumento de la presión arterial.

En el campo de la estética, son muchos los productos que ofrece la ozonoterapia. Como el ozono actúa en la piel como un poderoso activador celular, existen cremas, geles y emulsiones para el tratamiento del cutis o la piel en general. Combatiendo en gran medida la celulitis o como pantalla para las radiaciones solares.

El ozono también es utilizado como un potente inmunoestimulantes, desactivador del dolor y antiinflamatorio.
´



Ozono en Medicina y Efectos del Ozono

En el uso médico se utiliza una mezcla de O2 O3, también denominada Ozono Médico.

En el Ozono Médico el O3 se encuentra presente en concentraciones 30 veces inferiores con respecto al uso industrial ( 1 a 40 µg/mililitro de Oxígeno).



Efectos del Ozono en el metabolismo

Aceleración del uso de la glucosa por parte de las células.
Intervención en el metabolismo de las proteínas gracias a su afinidad con el grupo de los sulfidrílicos.
Reacción directa con los ácidos grasos insaturados que se transforman en compuestos hidrosolubles.
Efectos Biológicos del Ozono

Acción directa, en la aplicación local, de tipo desinfectante y trófico.
Efecto sistémico antibacteriano y antiviral debido a la discreta formación de peróxidos.
Aumento en la flexibilidad de los glóbulos rojos.
Aumento de la producción, siempre a nivel de glóbulos rojos, del 2-3 difosfoglicerato, responsable de la liberación del O2 en los tejidos.
Mejoría del metabolismo del O2 a nivel de los glóbulos rojos por que induce un aumento en el uso de la glucosa, en la ruptura de los ácidos, y por la activación de enzimas que inhiben los peróxidos y las radicales libres.
La potente acción desinfectante local, antiviral y anti bacteriano sistémico, son responsables de una mayor acción bactericida, fungicida y de inactivación viral, que se realiza mediante la oxidación de los microorganismos. El mecanismo antiséptico es parecido al que el organismo usa normalmente con la formación por parte de los leucocitos encargados de la fagocitosis bacteriana, de una molécula con propiedades oxidantes, parecida a la del O3.